Javier Milei generó polémica tras recurrir a una estrategia de trolls turcos en redes sociales para atacar al Grupo Clarín y defender a Santiago Caputo, luego de una discusión con el diputado de la UCR, Facundo Manes. El presidente de la Nación utilizó su cuenta en Twitter para vincular la situación con el monopolio de las telecomunicaciones, y sus declaraciones fueron respaldadas por varios usuarios en redes sociales, entre ellos algunos vinculados a cuentas turcas.
El conflicto comenzó cuando Santiago Oria, un periodista que mencionó a Facundo Manes, hizo referencia a una situación en la que Manes había esperado a Caputo a la salida de un encuentro. Milei intervino en la conversación, acusando a los periodistas del Grupo Clarín de estar “calientes” por no poder mantener el monopolio de las telecomunicaciones en Argentina. “Periodista que pertenece al Grupo Clarín, que está muy caliente porque no se puede quedar con el monopolio de las telecomunicaciones”, escribió el presidente.
Milei también habló de un “vuelto” por parte de Clarín y criticó a los periodistas por hablar de un “supuesto diálogo amenazante”, en referencia a una conversación previa entre Caputo y Manes.
Las declaraciones de Milei no pasaron desapercibidas y fueron rápidamente respaldadas por varios usuarios de Twitter, incluidos algunos que se identificaron como personas de Turquía. Usuarios como Aygül Zumra, Tugba Gül Baycanlar y Zehra Doğan se sumaron al apoyo al presidente, usando hashtags como #rugeelleon, que comenzó a circular en respuesta al discurso de Milei. En particular, Doğan utilizó el término #PeriodismoBasura, en clara referencia a los medios que, según ella, están alineados con intereses contrarios a la gestión de Milei.
Otro tuit que causó revuelo fue el de Serdar Poyraz, quien en un intento por dar apoyo a Milei utilizó el spanglish para afirmar que “¡The casta journalist is over!” (¡Los periodistas de la casta se acabaron!) y que Milei era el “future” (futuro). Este tipo de mensajes generó comparaciones con episodios previos de la política argentina, como las controversias por las publicaciones del macrismo durante la derrota en las PASO, cuando se utilizaban expresiones para intentar revertir la imagen del gobierno.
Esta estrategia de usar cuentas de apoyo en redes sociales no es nueva. En octubre del año pasado, el gobierno había recurrido a trolls indios para defender el ajuste universitario, lo que también fue objeto de críticas y burlas, como las de Eduardo Feinmann. En aquel momento, la utilización de granjas de trolls fue motivo de debate y controversia, como ahora sucede con la involucración de usuarios turcos.
Desde el caso del Criptogate, el gobierno ha perdido terreno en las redes sociales, con muchas de las conversaciones girando en torno a temas incómodos para la gestión de Milei. La estrategia de movilizar cuentas a favor en plataformas digitales, sin embargo, sigue siendo una herramienta clave en la comunicación política del actual presidente. /LPO
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