Ecuador se encuentra en plena jornada electoral, donde más de 13 millones de ciudadanos decidirán el futuro del país. La contienda presidencial está marcada por la polarización entre el actual presidente Daniel Noboa, quien busca la reelección, y Luisa González, candidata del correísmo, que propone un giro hacia el fortalecimiento del gasto social. Mientras Noboa se presenta como el líder que ha impulsado un plan de seguridad y desarrollo económico, González, apoyada por el movimiento Revolución Ciudadana, busca recuperar el poder para la izquierda ecuatoriana.
A pesar de que las encuestas previas muestran una ventaja para Noboa, el escenario sigue siendo incierto, ya que un porcentaje significativo de la población aún se mantiene indeciso. Según el tracking de Informe Confidencial, del 5 de febrero, el 41% de los votantes decididos se inclinan por Noboa, mientras que un 31% favorece a González. No obstante, la alta proporción de electores indecisos hace que todo pueda cambiar en las últimas horas antes de conocer los resultados.
Propuestas y medidas de los candidatos
Durante su gestión, Daniel Noboa ha implementado el “Plan Fénix”, que incluye el despliegue militar en zonas conflictivas y un endurecimiento de las penas para delitos relacionados con el narcotráfico. Estas medidas, según datos oficiales, han logrado reducir un 18% las muertes violentas y han permitido la captura de líderes de bandas delictivas. Por su parte, Luisa González, abogada y candidata vinculada al expresidente Rafael Correa, propone un aumento del gasto social y la revisión de algunas políticas de seguridad adoptadas por el gobierno de Noboa.
El sistema electoral y el panorama de segunda vuelta
En Ecuador, para ganar en primera vuelta, un candidato debe obtener más del 50% de los votos válidos o al menos el 40% con una diferencia de 10 puntos sobre el segundo candidato más votado. De no cumplirse ninguna de estas condiciones, se llevará a cabo una segunda vuelta electoral el 13 de abril de 2025.
La jornada electoral de hoy se desarrolla bajo estrictas medidas de seguridad, con el cierre de fronteras terrestres con Colombia y Perú desde el 8 hasta el 10 de febrero, como medida preventiva ante posibles intentos de desestabilización. Además, el gobierno ha reforzado la seguridad en puertos y fronteras para garantizar un proceso electoral seguro. El voto es obligatorio para los ciudadanos entre 18 y 65 años, y facultativo para los mayores de 65, personas con discapacidad y ecuatorianos en el exterior.
La crisis de violencia y los retos económicos
La situación electoral se desarrolla en un contexto de creciente violencia, desempleo, crisis energética y narcotráfico que afectan gravemente a la población. A pesar de las políticas de militarización impulsadas por el gobierno de Noboa, la inseguridad sigue siendo uno de los principales problemas del país. En el último año, Ecuador ha perdido más de 130,000 empleos formales, y la tasa de desempleo ha aumentado, superando el 4%. Además, la crisis energética sigue golpeando al país, con cortes de electricidad que pueden durar hasta 14 horas diarias, afectando a la vida cotidiana de los ciudadanos.
El clima electoral polarizado
El país se encuentra nuevamente dividido entre el correísmo y el anticorreísmo, con Luisa González intentando devolverle el poder a la izquierda ecuatoriana, ocho años después del último mandato de Rafael Correa. Aunque el expresidente ha mantenido un perfil bajo durante la campaña, su figura sigue estando presente, generando divisiones entre los votantes. Por su parte, Daniel Noboa ha lidiado con críticas a su gestión de la violencia, los problemas económicos y los enfrentamientos internos dentro de su propio gobierno.
Controversias y encuestas contradictorias
Las encuestas preelectorales han mostrado resultados contradictorios, alimentando la incertidumbre. Mientras algunos estudios, como el de Ipsos, otorgan a Noboa un 45,3% de intención de voto frente al 31,3% de González, otras encuestas, como la de Negocios & Estrategias, colocan a González en la delantera con un 45%. La disparidad entre los sondeos ha generado dudas sobre el resultado final, aunque la mayoría de las mediciones coinciden en que probablemente habrá segunda vuelta.
El futuro de Ecuador en juego
Las elecciones de hoy representan un momento crucial para el destino político y social de Ecuador. Con la violencia, la crisis económica y la inseguridad como principales temas de debate, el país se enfrenta a una encrucijada que podría definir su futuro en los próximos años. A pesar de las tensiones y divisiones, el pueblo ecuatoriano tiene la oportunidad de decidir si continúa con las políticas de Noboa o si le otorga el poder nuevamente a la izquierda, representada por Luisa González. Las encuestas y el clima electoral sugieren que, aunque el actual mandatario parte como favorito, el resultado final aún está por definirse, y la posibilidad de una segunda vuelta está más presente que nunca.
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